“DESDE LAS PROFUNDIDADES DE MI ALMA MI CORAZÓN CLAMA TU NOMBRE ...”

Desde las profundidades de mi alma mi corazón clama tu nombre. Envuelto en esta densa obscuridad, donde la noche eterna me abraza con su frió manto.

Donde la soledad y la desolación de mi espíritu me llenan de recuerdos amargos y desilusiones constantes.

Aun cuando errante camine por los desolados caminos donde las almas perdidas cruzan sus pasos y vagan sin rumbo buscando la expiación de sus pecados.

En los márgenes sombríos y desolados de la llanura marchita donde el esperanto no brilla y los deseos y las ilusiones maltrechas mueren en dolorosa agonía.

Donde han quedados los días de gloria y de jubilo, cuando los triunfos de las batallas ganadas eran el máximo honor de los guerreros del antiguo orden.

Que hacer cuando tus alas han sido quebradas y tus garras limadas cuando tu espada ha perdido el filo y tu armadura esta mutilada así como mutilado queda tu espíritu de batalla, mientras tu alma grita de horror mal trecha y herida al ver a tu esencia yacer sin vida a los pies de tu cuerpo vació y tu mente perdida.

Luchando aun contra todo aun cuando la batalla párese perdida desplegando las alas rotas y quebradas ante los fieros y destructivos vientos de tormenta. Para volver a recuperar el resplandor de glorias pasadas, así como la fuerza y el poder de ancestrales guerreros caídos en batalla.

Desde las profundidades de mi alma mi corazón clama tu nombre, mi voz se desgarra en los vientos, ahogándose en gritos sin sonido enviados hacia la nada en donde el olvido los abraza y se pierden en las tierras del jamás y el nunca.

En donde tus oídos jamás llegaran a oír mí llamado pues tú estas más lejos de lo que nadie esta, confinado en los centros de mi existencia en tu prisión de marfil y plata escondido en los mares de misterio que rodean a mi esencia.

Desde las profundidades de mi alma mi corazón clama tu nombre pero no encuentro respuesta a mis plegarias, y la voz que clama se pierde en el olvido.

Es tu voz la que ha llegado a mi con dulzura has respondido a mi llamado y has sellado el clamado de mi corazón y de mi alma con el simple toque de un beso que han sellado mis labios para dejar de gritar en los vientos.

Beso que ha sido capaz de borrar de mi todo recuerdo de mi vida y de mi muerte de mi tristeza y mi alegría ha sido algo tan grande que incluso he olvidado el nombre que tanto tiempo he pronunciado con tanta fuerza y tanta desesperación, y fue tan inmenso lo que ha pasado que incluso olvide mi nombre y mi credo, mi raza y mis deseos y ahora solo recuerdo aquel dulce beso que con un rose de tu boca sello mis labios para que dejaran de clamar hacia los vientos.